Recibirá una bienvenida tan cálida como el propio clima de esta isla idílica, con forma de banana y resplandecientes aguas azules, playas orladas de palmeras y refrescantes vientos alisios.
Los habitantes de Roatan, una de las tres Islas Bay frente a la costa de Honduras, son una mezcla de ocho culturas diferentes que comparten el orgullo por su tierra natal.
Muy próximo a la costa, el arrecife – con una impresionante variedad de especies y algunas de las formaciones de corales más impresionantes del Caribe – es considerado uno de los mejores del mundo.
Esta isla caribeña es el paraíso de los turistas que buscan arenas claras y mares tibios. Pero lo es aún más para los buceadores, ávidos de aguas cristalinas, peces multicolores y corales submarinos. Roatán parece un nombre lejano para los oídos de esta parte del continente, pero compañías como Copa Airlines ya tienen buenas rutas hacia esta isla paradisíaca.
Viajar a Roatán, en Honduras, es lo más parecido a un documental de Jacques Cousteau que alguien pueda recordar. Claro que en versión ‘siglo XXI’, porque esta isla caribeña está cada vez más acondicionada por la mano de las últimas tecnologías, y así lo demuestran las famosas cadenas hoteleras que se han instalado ya en la isla. Y otras grandes están por llegar: las terminales y los edificios de la Royal Caribbean y la Carnaval; y el Westin Resort & Spa Roatan, que se inaugurará a mediados de 2008.
No por nada el diario norteamericano The New York Times la puso dentro de su lista de 53 lugares para visitar el 2008. Roatán, que en lengua autóctona quiere decir ‘Reino celestial’, parece una isla que vive en un eterno estado de sopor y, sin embargo, esa puede ser una de sus principales virtudes, pues por fortuna todavía hay lugares de apariencia virginal y cándida. Sus extensas playas con increíbles fondos marinos son una buena muestra.
Roatán conforma, junto a Utila y Guanaja, las llamadas “Islas de la Bahía”. Es la más grande de las tres, y por lo mismo, quizás, tiene también uno de los arrecifes de coral más impactantes del mundo. El segundo más grande luego de Australia, si se busca la precisión. Es por ello que Roatán es sin dudarlo uno de esos sitios que los amantes del buceo añoran como si fuera su propia meca.
La isla está acordonada por una cadena montañosa que la recorre como si quisiera protegerla de los extraños turistas que la miran desde afuera. Pero de todas formas, los extraños llegaron, y se instalaron al lado de los garífunas, (como se conoce a los descendientes de los esclavos negros que los ingleses trajeron durante el siglo XVIII) para darle cuerda a un turismo cada vez más emergente. Los garífunas, eso sí, no se fueron a ningún lado y hoy habitan una de las localidades más autóctonas de la isla: Punta Gorda.
Otros sitios de interés son West End y West Bay, en donde se concentra la mayor oferta turística y hotelera. En este último, una buena opción es quedarse en el Paradise Beach Club, resort de tipo familiar que cuenta con habitaciones y departamentos para todo los gustos, bar sobre la arena, tres restaurantes y una heladería (www.paradisebeach.com). El pueblo con más habitantes es Coxen Hole, pero si se quiere ver algo realmente pintoresco, una buena idea es ir en algún bote-taxi al Oak Ridge, un balneario con palafitos de colores y casas que hacen recordar que esto sigue siendo Honduras.
En Roatán hay más de cien puntos especiales para sumergirse, extasiarse mirando el fondo marino y conocer miles de especies acuáticas. Tantas, que retener sus nombres se hace imposible. Corales, peces y vegetación marina son algunas de las bondades que podrán apreciar los buzos expertos, pero también aquellos que no lo son tanto, pues los sitios para practicar este deporte cubre todos los niveles de experiencia: desde el de superficie hasta en profundidad.
Tiburones, meros, pulpos, erizos de mar y estrellas de múltiples colores y especies, pueden ser vistos incluso de noche, porque los gusanos fluorescentes de mar y el plancton iluminan las aguas casi como si hubiera luz natural. Eso, sumado a la buena visibilidad (que va entre 24 y 37 metros) y a las cálidas temperaturas, que pocas veces bajan de los veinte grados, forman un espectáculo único para los noctámbulos. Algunos de los sitios más populares de buceo en Roatán son el West End Wall (para buceo de profundidad), Doc´s Elbow (para buceo nocturno) y la Barbaretta Wall.