Con sólo 88 cabinas y 176 pasajeros, el VIVA One es, como su propio nombre indica, el primer buque construido por la naviera VIVA CRUISES, una filial de la compañía suiza Scylla AG, que, con una flota de 40 barcos, hasta hace poco sólo alquilaba cruceros a las grandes mayoristas internacionales.
En 2018 la naviera decidió explotar algunos de sus propios buques, creando esta encantadora naviera premium, con buques lujosos y elegantes, para ofrecer un confortable viaje por los principales ríos de Europa.
El MS VIVA ONE es el mejor ejemplo de este espíritu de superación y de esta apuesta por la excelencia. Los espacios públicos son de una refinada elegancia, con toques clásicos y contemporáneos perfectamente equilibrados.
El Restaurante "Riverside" ofrece grandes ventanales panorámicos con vistas extraordinarias al paisaje fluvial que nos rodea, y el exclusivo "Viva´s Bistró" (situado en popa) podremos disfrutar de un cuidado menú ideal para celebraciones especiales.
Todos los camarotes son exteriores a bordo del MS VIVA ONE, y ofrecen diferentes categorías para que cada pasajero encuentre la que mejor le conviene. En la cubierta inferior, justo en la linea de flotación, encontraremos las cabinas standard con una ventana alta con vistas al río y luz natural.
En las dos cubiertas intermedia y superior, encontramos los lujosos camarotes con balcón francés. Y para los pasajeros más exigentes encontraremos las exclusivas suites con 25 m² de superficie y un balcón privado de 2 m² que harán las delicias de los navegadores más expertos.
En la cubierta solarium podremos disfrutar del paisaje mientras navegamos, en el jacuzzi o en las hamacas del sun deck. En el Spa podremos darnos un relajante masaje o desintoxicarnos en la sauna finlandesa.
En proa tendremos el Panorama Lounge, con enormes ventanales panorámicos para que no perdamos detalle del paisaje, con confortables sofás y sillones donde poder disfrutar de nuestras bebidas favoritas, servidas con esmero por el personal de a bordo.
El buque tiene un tamaño medio, 135 metros de eslora, con un calado de sólo 1,5 metros, ideal para los ríos menos caudalosos de Europa, como el Mosela o el Main, que precisan de buques más manejables por tener esclusas más pequeñas y puertos de atraque menos grandes.